Declaración Publica Consejo Regional de Pastores de la Araucanía
Como Consejo Regional de Pastores de la Araucanía, venimos en declarar públicamente de manera respetuosa y sencilla, que como hijos de Dios intentamos basar nuestro pensamiento, ser y conducta en los principios, valores y guía que la Biblia nos presenta. Hemos visto que el modelo bíblico adecuadamente implantado, ha llevado a muchas sociedades, mientras se han mantenido sometidos a ella, a crear ambientes de respeto, servicio y amor al prójimo, lo que en definitiva ha sido una potente y concreta contribución para la sociedad.
Debemos decir al respecto que no creemos que exista un Cristianismo de izquierda, de derecha o de centro. Lamentamos sin embargo que nuestro pueblo Evangélico está siendo dividido por estas consideraciones humanistas que han tratado de usar a nuestros hermanos, a partir de la manipulación que algunos líderes de la misma Iglesia han hecho, llevando a ésta a abanderizarse por uno u otro candidato.
Hemos reiterado permanentemente que nosotros no adherimos a ningún partido político o asociación de ellos, y menos a aquellos que en sus propuestas plantean aspectos que minan la fe cristiana. Y por tanto no llamamos a votar por ningún candidato en particular. Sí hemos tomado el compromiso de informar a nuestra gente de dichos programas, llamando a votar no solo en conciencia, sino además, en forma coherente a los principios y valores Bíblicos.
Estos principios bíblicos nos hacen expresar, frente a dichos programas que:
• Porque creemos en que Dios creó solamente al hombre y a la mujer, rechazamos cualquier intento de aceptar las uniones entre personas del mismo sexo, así como de llamar a estas uniones matrimonio igualitario.
• Porque creemos en los derechos superiores del niño, rechazamos la adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo, así como el intento de bajar la edad de relaciones sexuales consentidas entre un adulto y un menor.
• Porque creemos en el derecho a la vida, rechazamos cualquier intento de legislar a favor del aborto en cualquiera de sus formas o momentos.
• Porque creemos en que Dios creó al hombre a su propia imagen, teniendo sólo Él el derecho y la potestad de iniciarla y terminarla, rechazamos la eutanasia.
• Porque creemos en la Justicia y Dignidad de las personas y la realidad de las familias, como núcleo fundamental de la sociedad, rechazamos cualquier intento venga de quien venga, de explotar a las personas no proveyendo, por ejemplo un sueldo digno y adecuado que permita a las familias vivir adecuadamente e incluso ahorrar para el futuro. Además creemos que se debe velar para que todas las personas lleguen a contar con pensiones que les permitan vivir su vejez dignamente.
• Porque creemos en que Dios debe estar presente en todas las áreas de la vida del ser humano, rechazamos los intentos de llevar a nuestra sociedad a un extremo de laicismo que haga seguir minando los altos principios y valores de la Biblia, sacándolos de las escuelas y otros espacios públicos.
• Porque creemos que Dios nos dio un cuerpo con vida y salud que debemos cuidar, rechazamos la legislación que permita el consumo de drogas partiendo de la marihuana, puesto que no trae ningún bien ni al cuerpo humano ni a la sociedad.
• Porque creemos que existe una ley anterior y superior a la dada por los hombres, rechazamos legislar frente a todo aquello que simplemente responda a presiones e intereses de grupos sin importar las consecuencias de dichas leyes que afecten la salud de la nación. No necesariamente lo que la ley permite es lícito o éticamente correcto.
• Porque creemos que Dios nos creó a todos iguales en dignidad y valor, es que rechazamos el trato discriminatorio así como la opresión histórica y actual de la que han sido objeto los Pueblos indígenas de nuestro país. Creemos que el respeto a su identidad debe ser considerada por parte de toda nuestra sociedad, desde el Estado hasta la iglesia, desde la sociedad y hasta cada individuo, lo que nos permitirá avanzar como hermanos.
• Porque creemos que el Evangelio reivindica el derecho de cada persona a recibir una educación universal y de calidad, rechazamos modelos de educación que lucren, hagan discriminación o impidan el acceso de todos los ciudadanos a una educación adecuada. Y rechazamos el intento de mostrar la calidad como sinónimo de laicismo o contenidos que relativicen los valores morales y promuevan la liberalidad de las conductas.
• Porque creemos que Dios nos muestra verdades absolutas, rechazamos el intento de una sociedad progresista que relativiza todo, y que afecta desde la sagrada vida de las personas hasta las relaciones sin límites ni respeto entre ellas.
Por todo lo anterior, como Consejo de Pastores hacemos un llamado a la sociedad, a la conciencia de las personas, a enmendar el rumbo. Llamamos a reconsiderar el camino por el cual estamos transitando, y rogamos en el nombre de Cristo, reconcíliense con Dios. Como cristianos evangélicos, estamos intercediendo ante Dios por toda nuestra sociedad, y nuestro afán no es afectar ni oprimir la vida de las personas, sino ayudar concretamente a su liberación, reconociendo que Jesucristo ha demostrado históricamente ser la verdad superior, que nos hace verdaderamente libres.
Pr. Jorge Neira V. Pr. Edgardo Salamanca M.
Secretario Presidente
Edgardo Sepúlveda
H.Abogado Asesor
Pr. Andrés Casanueva N.